Valdivia: Ornitólogos critican a autoridad por muerte de cisnes
Valdivia: Ornitólogos critican a autoridad por muerte de cisnes
Unión de especialistas declaró que esta crisis ambiental, económica y de salud ha dejado entrever serias deficiencias en la actuación de los organismos encargados del medio ambiente.
El presidente de la Unión de Ornitólogos de Chile (Unoch), Jurgen Rottmann, emitió este martes duras críticas a los organismos gubernamentales del medio ambiente por la catástrofe anunciada con 10 años de anticipación en el Santuario de la Naturaleza Carlos Andwandter, de Valdivia, donde murieron decenas de cisnes de cuello negro.
El también directivo del Comité Pro Defensa de la Fauna y Flora (Codeff) recordó que los resultados del estudio elaborado por el organismo sobre los impactos que produciría la puesta en marcha del mega proyecto de la planta celulosa Valdivia en un ecosistema que no resistía más cargas industriales, como son los humedales del río Cruces, en la Décima Región.
Rottmann, quien es médico veterinario, declaró que esta crisis ambiental, económica y de salud ha dejado entrever serias deficiencias en la actuación de los organismos encargados del medio ambiente.
A juicio del estudioso de la flora y fauna, la Corema debería dar la cara porque fueron ellos quienes autorizaron la puesta en marcha de la planta y debieran reconocer públicamente que se equivocaron.
Hay otras instituciones que debieran estar al frente, como el SAG, que debe velar por los animales. Y la Conaf, que también se ve ausente. Y no olvidemos a la Dirección General de Aguas y ella tiene que ver con aguas potables, con contaminación y también están calladitos. Todos ellos deben dar la cara, recalcó.
Según explicó el profesional, la Unión de Ornitólogos de Chile está para defender a las aves y a los cisnes de cuello negro, por lo tanto exigimos que el agua no debe ser venenosa para el desarrollo del luchecillo, con todo lo que ello involucre.
Asimismo, lamentó lo que calificó como un desastre ecológico de grandes proporciones donde un santuario de la naturaleza, sitio Ramsar de protección internacional, el principal lugar de anidación de cisnes de cuello negro de Sudamérica fue seriamente contaminado y las instituciones de gobierno están para restituirlo.
De ubicarse al culpable nos haremos parte de acciones judiciales. El problema es que con estas acciones no se alimentan los cisnes. A los cisnes no podemos engañarlos; ellos volverán al santuario cuando el agua esté limpia, indicó.
Unión de especialistas declaró que esta crisis ambiental, económica y de salud ha dejado entrever serias deficiencias en la actuación de los organismos encargados del medio ambiente.
El presidente de la Unión de Ornitólogos de Chile (Unoch), Jurgen Rottmann, emitió este martes duras críticas a los organismos gubernamentales del medio ambiente por la catástrofe anunciada con 10 años de anticipación en el Santuario de la Naturaleza Carlos Andwandter, de Valdivia, donde murieron decenas de cisnes de cuello negro.
El también directivo del Comité Pro Defensa de la Fauna y Flora (Codeff) recordó que los resultados del estudio elaborado por el organismo sobre los impactos que produciría la puesta en marcha del mega proyecto de la planta celulosa Valdivia en un ecosistema que no resistía más cargas industriales, como son los humedales del río Cruces, en la Décima Región.
Rottmann, quien es médico veterinario, declaró que esta crisis ambiental, económica y de salud ha dejado entrever serias deficiencias en la actuación de los organismos encargados del medio ambiente.
A juicio del estudioso de la flora y fauna, la Corema debería dar la cara porque fueron ellos quienes autorizaron la puesta en marcha de la planta y debieran reconocer públicamente que se equivocaron.
Hay otras instituciones que debieran estar al frente, como el SAG, que debe velar por los animales. Y la Conaf, que también se ve ausente. Y no olvidemos a la Dirección General de Aguas y ella tiene que ver con aguas potables, con contaminación y también están calladitos. Todos ellos deben dar la cara, recalcó.
Según explicó el profesional, la Unión de Ornitólogos de Chile está para defender a las aves y a los cisnes de cuello negro, por lo tanto exigimos que el agua no debe ser venenosa para el desarrollo del luchecillo, con todo lo que ello involucre.
Asimismo, lamentó lo que calificó como un desastre ecológico de grandes proporciones donde un santuario de la naturaleza, sitio Ramsar de protección internacional, el principal lugar de anidación de cisnes de cuello negro de Sudamérica fue seriamente contaminado y las instituciones de gobierno están para restituirlo.
De ubicarse al culpable nos haremos parte de acciones judiciales. El problema es que con estas acciones no se alimentan los cisnes. A los cisnes no podemos engañarlos; ellos volverán al santuario cuando el agua esté limpia, indicó.
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